Claudia Chichilla Vettorazi
Ciudad de Guatemala
Claudia Chinchilla Vettorazi es licenciada en la enseñanza de la comunicación y el lenguaje y profesora de enseñanza media en lengua y literatura, ambas por la Universidad Mariano Gálvez de Guatemala. Se desempeña como docente de comunicación, literatura y escenología.
Se dedica a escribir poesía, narrativa, ensayo y, eventualmente, prólogos para las obras de algunos amigos entrañables, de quienes también ha tenido el honor de presentar sus libros. Entre sus publicaciones se encuentran los títulos: Pájaros ciegos (2022, Morales Santos Editor), Realidades obligadas (2015, Editorial Mandrágora) y Líquida y elemental (2005, Magna Terra). Su obra está compilada en cerca de 20 antologías nacionales e internacionales, así como en publicaciones digitales.
Entre sus actividades, imparte conferencias y talleres en diversos ámbitos, siempre en torno al tema literario, dentro de estos, con el Consejo Latinoamericano de Educación por el Arte, CLEA Guatemala, en donde ha coordinado las tres jornadas de literatura y participado como tallerista invitada desde el 2018. Ha presentado ponencias en Guatemala, Nicaragua, México y Estados Unidos, atendiendo a su interés por la vida y obra de Miguel Ángel Asturias y Rubén Darío, así como por temas relacionados con el teatro.
Es fundadora de la agrupación Amigos de Miguel Ángel Asturias, cofundadora de la Asociación América Madre, filial Guatemala, con sede en Argentina, cofundadora de la Casa de la cultura en Tapachula, México y en León, Nicaragua. Recibió la distinción de Maestra del año por su labor en la Escuela Nacional de Arte Dramático “Carlos Figueroa Juárez” otorgada por el Ministerio de Cultura y Deportes; la medalla Irma Droz, de la Asociación América Madre, radicada en Córdova, Argentina. El colectivo cultural Pie de Lana la destaca como Vecina Distinguida y ha recibido diversos reconocimientos como Huésped de honor en varias ciudades e instituciones.
Entre sus placeres se encuentran sus visitas al Lago de Atitlán, la lectura y una buena conversación con los amigos.
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Claudia Chichilla Vettorazi
Ciudad de Guatemala
Claudia Chinchilla Vettorazi es licenciada en la enseñanza de la comunicación y el lenguaje y profesora de enseñanza media en lengua y literatura, ambas por la Universidad Mariano Gálvez de Guatemala. Se desempeña como docente de comunicación, literatura y escenología.
Se dedica a escribir poesía, narrativa, ensayo y, eventualmente, prólogos para las obras de algunos amigos entrañables, de quienes también ha tenido el honor de presentar sus libros. Entre sus publicaciones se encuentran los títulos: Pájaros ciegos (2022, Morales Santos Editor), Realidades obligadas (2015, Editorial Mandrágora) y Líquida y elemental (2005, Magna Terra). Su obra está compilada en cerca de 20 antologías nacionales e internacionales, así como en publicaciones digitales.
Entre sus actividades, imparte conferencias y talleres en diversos ámbitos, siempre en torno al tema literario, dentro de estos, con el Consejo Latinoamericano de Educación por el Arte, CLEA Guatemala, en donde ha coordinado las tres jornadas de literatura y participado como tallerista invitada desde el 2018. Ha presentado ponencias en Guatemala, Nicaragua, México y Estados Unidos, atendiendo a su interés por la vida y obra de Miguel Ángel Asturias y Rubén Darío, así como por temas relacionados con el teatro.
Es fundadora de la agrupación Amigos de Miguel Ángel Asturias, cofundadora de la Asociación América Madre, filial Guatemala, con sede en Argentina, cofundadora de la Casa de la cultura en Tapachula, México y en León, Nicaragua. Recibió la distinción de Maestra del año por su labor en la Escuela Nacional de Arte Dramático “Carlos Figueroa Juárez” otorgada por el Ministerio de Cultura y Deportes; la medalla Irma Droz, de la Asociación América Madre, radicada en Córdova, Argentina. El colectivo cultural Pie de Lana la destaca como Vecina Distinguida y ha recibido diversos reconocimientos como Huésped de honor en varias ciudades e instituciones.
Entre sus placeres se encuentran sus visitas al Lago de Atitlán, la lectura y una buena conversación con los amigos.